La decoración floral es uno de los elementos clave de la boda, la embellece y es capaz de transformar por completo su imagen. Sin embargo, elegir las flores para el gran día no es algo que pueda hacerse al azar. Hay elementos determinantes, como la época del año o la personalidad de los novios.
El primer paso para acertar con las flores de la boda es contar con profesionales con experiencia, que sepan combinarlas, crear estructuras con ellas y seleccionar las más adecuadas para cada momento de la celebración y época del año. “Para una enamorada de la naturaleza, cómo yo, y agradecida de todos los regalos que esta nos ofrece, decorar con flores es como componer música de colores, aromas y texturas”, explica Trini, florista de Loving the Flowers.
Desde esta floristería especializada en decoración floral para bodas afincada en Sitges profundizan en la importancia de su labor como parte de la decoración de la boda. “Cuando invitamos a nuestros novios a visitarnos, es para que aprecien cómo una composición floral puede dar sentido a la decoración. Lo que siempre les proponemos es crear un diseño a su medida, teniendo en cuenta fechas, lugar de celebración y tonalidades, tanto en las flores como en el resto de la decoración”.
El equipo de Loving The Flowers siempre trabaja con flor de temporada: “Dejamos a elección de los novios la tonalidad, pero es un hecho que la sostenibilidad la tenemos que implantar entre todos y, siendo nosotros floristas, debemos respetar lo que la naturaleza nos ofrece más que en ningún otro sector”, explica. “Además, la flor, si es su época, tiene una mayor durabilidad”, asegura.
A partir de esto, el equipo de Loving The Flowers, formado por Libia y Trini, nos dan algunas claves para acertar con la elección de las flores.
4 factores clave para elegir las flores de la boda
Hay algunos factores que resultan determinantes a la hora de elegir las flores y los elementos que configuran la decoración floral de una boda. Para Loving The Flowers estos son los principales:
La época del año
“Cuando recibimos una boda, siempre estudiamos los factores que van ligados a la celebración”, explican desde Loving The Flowers. “El primero de ellos es la estación del año”.
“En invierno las decoraciones son ricas en verdes, líquenes… Como flores contamos con rosas maravillosas, camelias, narcisos, amarilis, crisantemos, flores de almendro… Las creatividades son acogedoras, solemos usar velas y velones que, además de aportar calidez, ayudan con la iluminación del espacio, ya que la luz se va muy pronto”.
“En primavera solemos incluir francesillas (ranúnculo), tulipanes, muscaris, astrantias, magnolios, hortensias, girasoles, rosas, jacintos, anémonas, claveles, peonías… En esta época del año hay una gran variedad de especies, que va cambiando conforme avanza el calor hacia el verano”.
“En verano recurrimos a claveles, astromelias, escabiosas, rosas de jardín, gladiolos, girasoles, gerberas, hortensias, alhelies, lisianthus. Nos encanta usar limones para dar ese toque de color veraniego al final del verano. Y en septiembre, recurrimos a las uvas”.
“En otoño usamos dalias, escabiosas, hortensias, crisantemos, rosas, calas, áster, flores de frutos… Realizamos bodegones con frutas y hojas o plantas que recreen la estación”.
La personalidad de los novios
“Reservamos a los novios la elección de las tonalidades de las flores. Pero estas no pueden estar determinadas por las tendencias que se aprecian en las redes sociales. Bajo nuestro punto de vista, deben ser reflejo de la personalidad y del momento vital de las parejas. Así, pueden ir desde los tonos clásicos, más elegantes, a colores atrevidos. Lo importante es que haya una buena ejecución del trabajo floral, para que el resultado sea espectacular y de él resulte la magia que los novios esperaban”.
Por otra parte, “en una celebración tan inmensa del amor como es el día de la boda, con la decoración floral deberíamos ser generosos. Porque las flores representan el amor sin más. Tienen un lenguaje que nos puede trasladar a infinidad de momentos de la vida, desde la infancia a ocasiones muy especiales. Es importante para nosotras conocer a los novios para poder plasmar su personalidad y reflejar estos momentos tan importantes para ellos en la decoración de su boda.”
“El ramo de la novia es nuestro elemento estrella y está ligado a esto. Su elección la va a acompañar en ese día y el resto de su vida, cuando revise sus recuerdos. Siempre lo elaboramos a su medida, relacionándolo con su traje, con su pelo, sus zapatos… Todo cuenta, el ramo tiene que ser ella”.
El tipo de ceremonia
“Si la ceremonia es religiosa, en Loving The Flowers nos decantamos por el menos es más. Los templos, las iglesias, los monasterios están cargados de significado. En la mayoría de los casos son obras de arte en sí mismos o contienen obras de arte, con lo que la decoración floral debe ser ligera, de tonos claros”.
“En las fachadas exteriores y dependiendo de su arquitectura, a veces nos permitimos decorar con columnas tipo arco llenas de verde, como viburnum o roble y la flor de temporada que hayamos escogido con los novios, para dar ese toque natural que nos invita a pasar a la magia de la celebración del amor”.
“Si la ceremonia es civil, solemos aconsejar buscar el sitio más idóneo para recrear un espacio aportando un arco o el elemento floral que deseen nuestros novios, además de diferentes elementos decorativos y mobiliario: sillas, atril, bancadas, alfombras… para decorar al detalle ese momento mágico que se vive con el “Sí, quiero”. Siempre trabajamos a medida para cada pareja”.
“Cuando la ceremonia es al aire libre recomendamos colocar sombrillas de tipo balinesas en caso de ser necesario, porque es muy incomodo tener que pasarte toda la ceremonia con los ojos semi cerrados y perderte ese momento tan importante de las personas que más quieres”.
“Nos encanta que los testigos y las damas de honor lleven flores, ya sea con botoniers, pulseras o ramilletes. Representan la intimidad que han depositado en ellos. Y si hay cortejo de niños, entonces ya morimos de amor confeccionando coronitas y capazos para que acompañen con pétalos de flor a los novios”.
El estilo de la celebración
Cuando llega el momento de la celebración del banquete entra en juego el diseño floral del salón. “Decidimos si la sala necesita elementos de dimensión como columnas o techos de verdes. Es importante saber qué tipo de mesas van a montar los novios, para así elegir el tipo de centro. A nosotros nos encanta, cuando el espacio lo permite, jugar con las alturas de los centros”.
“También determinamos qué vamos a hacer con el seating plan. Nos gusta relacionarlo con los novios a través de su profesión, hobbies, viajes… Decidimos, además, si vamos a instalar un bufete de verdes y flores en algún rincón especial, si en la fiesta van a tener un photocall…
Vamos cuajando así la decoración con los elementos decorativos que podemos ofrecerles (burras, sillones, cartelería). Toda nuestra decoración va relacionada en elementos verdes, tonos y flores”.
“Como floristas lo que más agradecemos es que los novios depositen sus sueños en nuestros diseños florales. Cuando nos escogen ya saben que nuestra creatividad va encaminada a reproducir la naturaleza en los espacios con centros Garden Style, columnas o techos recubiertos con verdes, velas para dar intimidad, mobiliario relacionado con sus hobbies, con sus anhelos… Recreamos los espacios con flor con mucho mimo. Buscamos que nuestro trabajo les haga sentir felices, que produzca una sensación de satisfacción y delicadeza”.
Y es que no todo vale en la decoración floral de la boda.
