Marta y Julián se conocieron en Madrid y con solo una cita ambos supieron que eran el uno para el otro. Hoy te contamos su historia de amor.
Se conocieron en el restaurante Marieta, en Madrid. Marta había cenado allí con sus amigas y antes del cierre él se acercó para hablar con ella. Antes de despedirse le pidió su Facebook y empezaron a hablar por allí. No fue hasta después de tres meses cuando Marta se decidió a quedar con él. Bastó una cita para saber que eran el uno para el otro.
Marta, una novia con mucho estilo
- El vestido y los complementos
Desde el principio, Marta tuvo claro que quería llevar un vestido de princesa, pero también quería permitirse bailar mucho, así que pensó en un traje dos en uno que se desmontara fácilmente como la mejor opción.
Su madre y ella estuvieron visitando diferentes sitios antes de decidirse por la diseñadora Laura Monge, pero cuando la conocieron sintieron una conexión especial. Todo fueron facilidades para llevar a cabo la idea que Marta tenía. La comprendió y le dio forma a la primera. El diseño, de escote trasero y manga larga con sus iniciales bordadas en el puño, iba acompañado de una sobrefalda con cola larga y un velo de tul que partía de su cabeza sujeto a una tiara. Este accesorio fue su «algo antiguo», una joya familiar de Cartier que ha llevado toda su familia.
Cuando no está montada como tiara es una pulsera.
Para la comida, Marta se quitó el velo y para el baile la sobrefalda y las mangas. «El vestido parecía otro completamente diferente», cuenta la novia. Después el baile nupcial sustituyó la tiara por una corona que hizo ella misma con unas hortensias preservadas y un lazo de raso blanco.
- Los zapatos
Los zapatos eran un modelo de Salo Madrid, anudado en el tobillo en el mismo color que el vestido.
- Joyas
Marta llevó el anillo de pedida de Julián, de Javier Gómez-Zuloaga, y unos pendientes que le regalaron sus padres.
- Las flores
Tanto las flores de la iglesia como las del ramo de novia, silvestre en tonos verdes con pinceladas de blanco, fueron de Bimflowers.
Los centros de mesa de la finca eran de Flores Búcaro.
- El maquillaje y el peinado
Saray Peña Sojo se ocupó tanto del maquillaje como del peinado.
Juntas eligieron un maquillaje muy natural y le hizo un semirrecogido con ondas amplias que dejaba el rostro descubierto. Fijó el velo a la tiara con ayuda de horquillas invisibles.
Julián, un novio muy elegante
Julián llevó chaqué y camisa hechos a medida de la sastrería Suitz (Madrid). El novio sabía que Marta llevaría un vestido dos en uno, así que él decidió llevar un chaleco reversible y dos corbatas para poder cambiar su look también. Tanto la corbata principal, de amebas en tonos azules y verdes, que combinó con el chaleco en el mismo gris del traje, como la segunda corbata, azul marino, que combinó con el chaleco de cuadros verde, fueron regalo de su mejor amiga, que le acompañó a comprarlas a El Corte Inglés.
Como complementos, Julián llevó su reloj de pedida de Rolex.
La madrina y la madre de la novia
Ambas iban guapísimas. La madrina llevó un traje hecho a medida por su modista de confianza, mientras que la madre de Marta se hizo un vestido con la misma diseñadora que la novia. Fue Laura Monge quien creó el diseño.
La ceremonia y la celebración
Marta y Julián se casaron el 30 de junio de 2018 en la Iglesia Santa María Magdalena, en Torrelaguna, y la celebración fue en la Finca Casa de Oficios. Se trata de un espacio para bodas súper especial en Torremocha del Jarama. Eran unos trescientos invitados y realizaron el cóctel y el baile en el exterior, frente al espectacular campo que rodea la finca. El banquete fue en la carpa.
- Catering
De la comida se ocupó El Laurel Catering, el catering de la finca, y superó todas las expectativas de nuestra pareja. «Estaba todo delicioso». También se ocuparon del postre. «La finca estaba preciosa, estuvimos comodísimos y nos sentimos perfectamente atendidos en todo momento a pesar de todos los que éramos».
Según nos cuenta los novios: «Hubo muchos detalles preciosos en la finca, desde la decoración del salón del banquete, con esa carpa espectacular repleta de lucecitas, a las mesas, o a nuestro original seating felino».
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Decoración
A Marta y a Julián les encanta los gatos. Como la madre de Marta es pintora realizó unas láminas pintadas a mano de diferentes especies de gatos, una para cada mesa. La de la mesa principal representaba los gatos de nuestros novios, que por aquel entonces tenían dos. A los amigos que tenían gatos les pusieron en las mesas con su razas correspondientes.
Algunos se llevaron su lámina como recuerdo y las que sobraron las conservan enmarcadas en su habitación.
También decoraron diferentes puntos de la finca con fotografías de sus viajes. A esta pareja le encanta viajar e hicieron una selección de fotos que se repartieron por diferentes espacios.
Invitaciones y regalos para los invitados
Las invitaciones las hicieron con Gráficas Capitolio y las invitadas les regalaron alpargatas.
Además de otros detalles, hubo uno muy original, y es que Julián regaló a todos sus testigos el mimo modelo de calcetines que llevó él.
Julián llevaba unos calcetines de Jimmy Lion con botellines de Mahou estampados y todos asistieron a la boda con los divertidos calcetines.
El momento más emotivo
Nuestros novios destacan dos momentos muy emotivos, aunque hubo muchos más. Ambos coinciden en el momento del «sí, quiero» en la iglesia y cuando Julián le dedicó a Marta la canción Por Debajo de la Mesa, de Luis Miguel. El novio sorprendió de esta manera a nuestra protagonista, acompañado por todos sus testigos que hicieron de coro.
Wedding Planner
PiPa Comunicación y Eventos ayudó con toda la organización de este enlace.
Fotógrafo
De las fotos se ocupó Click10. El resultado fue un álbum espectacular con alrededor de dos mil instantáneas maravillosas, cuenta la novia. El video lo hizo Ocho/Veinticuatro. «No pudimos elegir mejor».
Luna de miel
Nuestros novios estuvieron un mes en África. A los dos les encanta los animales y recorrieron Nambia, Botswana, Zambia, Uganda, y después pasaron unos días de relax en las Maldivas.
¡Esperamos que lo pasaran muy bien y que sigan siendo muy felices por y para siempre!