Estos son los motivos que harán que no lo dudes ni un segundo a la hora de comprometerte con un psicólogo: razones por las que casarse con un psicólogo
Sabemos las razones por las que casarnos con un abogado. Los motivos para casarse con una enfermera. Y también cuáles son las razones por las que comprometernos con un o una periodista. Pero, ¿cuáles son los motivos por los que casarnos con un psicólogo? ¡Os los contamos a continuación!
Una de las profesiones más ventajosas para mantener una relación es con un psicólogo, personas serias y con grandes virtudes, que te sacarán de más de un problema.
Razones por las que casarse con un psicólogo
– Tienen mucha paciencia: a veces solemos tener cambios de humor importantes que sacan a cualquier persona de quicio. Un psicólogo conoce este tipo de comportamientos y sabrán sobrellevarlos. Además tienen mucha paciencia con los enfados.
– Saben cómo controlar los nervios: podemos desencadenar nuestros nervios en muchas situaciones. Momentos de pánico que nos sacarán de nuestras casillas, harán que nos quedemos bloqueados y no sepamos reaccionar. Si esto te suele pasar, con un psicólogo, seguro que lo llevarás mucho mejor. Ellos sabrán tranquilizarnos y nos enseñarán cómo reaccionar en estas situaciones.
– Les gusta escuchar: muchas veces nos quejamos de la falta de atención por parte de nuestra pareja. Esto no nos pasará con un psicólogo o psicóloga. Ellos están acostumbrados a escuchar problemas ajenos aunque no les interese ni lo más mínimo.
– Soluciones para todos los problemas: tienen solución para la mayoría de los problemas. Aunque a tu problema no le veas salida, el psicólogo siempre tendrá un remedio para salir de él. No te preocupes porque siempre intentará llevarnos por el mejor camino.
– Poder de persuasión: los psicólogos tienen un gran poder de persuasión y convicción. Cuando estemos tomando una decisión equivocada, ellos sabrán guiarnos para no equivocarnos.
– Economía: puede que suene un poco interesado pero, a veces, esto es importante. Los psicólogos suelen estar bien posicionados económicamente, ya que por cada sesión cobran cantidades elevadas a su cliente.
– Tú no tendrás que pagar por una sesión: si tienes algún problema, tan solo tendrás que tumbarte en el sofá y contárselo. Eres su pareja, no te cobrará nada y sabrá darte la mejor solución.
– Tienen su propio encanto: como todas las profesiones, el psicólogo tiene su propio encanto. Su mirada de interesante puede volvernos locos casi sin darnos cuenta.
– Es desinteresado: el psicólogo ha elegido una profesión en la que su misión es ayudar a los demás y eso es lo que le hace feliz, poder ayudar a las personas.
– Sabe cómo da placer: los psicólogos están acostumbrados a escuchar problemas de todo tipo y muchos de estos problemas son sexuales. Ellos conocen las diferentes situaciones que pueden darse y saben lo que su pareja quiere y necesita, y lo que no.