Muchas son las novias que quieren lucir una bonita corona el día de su boda, cual princesas de cuento. Hoy te enseñamos dos modelos que han brillado esta semana
Estos últimos días hemos podido ver dos auténticas joyas que servirán de inspiración a las novias más clásicas. Y es que, muchas mujeres sueñan con llevar el día de su boda una bonita corona. Un complemento que las haga brillar aún más, si cabe. Y hoy os proponemos dos coronas maravillosas que han lucido, por un lado, Sol Matossian el día de su boda. Y por otro, la reina Letizia. ¿Preparadas?
La tiara de Sol Matossian
Sol Matossian Márquez es nieta de Tessa de Baviera, prima segunda del Rey Emérito. La joven ha dado el “sí, quiero” a su novio Nicholas Green, un joven sudafricano, con el que se ha unido en matrimonio en una finca madrileña. Sol es la hija de Sonia Márquez de Baviera y del financiero Miguel Matossian Osorio, una familia que pertenece a la jet-set española. La novia es la mayor de tres hermanos y se ha casado en la Finca Soto Mozanaque, propiedad de Ioannes Osorio, primo de su padre. Para este día tan importante, la novia escogió un vestido del diseñador Jorge Vázquez. Un vestido con escote barco, mangas abullonadas y falda con incrustaciones de motivo vegetal. Pero además del vestido de novia, ha habido otro elemento que ha llamado mucho la atención de su look: la espectacular tiara de diamantes y esmeraldas en forma de flor que salía del velo y sus pendientes a juego.
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Las flores de esta corona pertenecieron a la reina Isabel II. Se trata de unas piezas muy valoradas, pues se conservan pocas joyas suyas en la actualidad. Fue en 1904 cuando la reina María Cristina adquirió los siete broches florales que hoy componen esta corona. Estas joyas fueron un regalo por la Reina a su hija, la infanta María Teresa, con motivo de su matrimonio con el príncipe Fernando de Baviera, hijo de la infanta Paz, en 1906. La infanta lució esta tiara en el bautizo de la infanta María Cristina en 1911. Pero cuando fallece un año más tarde, la tiara la hereda el infante José Eugenio. Su mujer, Marisol de Messía y Lesseps llevó la diadema de flores en varias ocasiones, como el Baile de Debutantes de doña Pilar y en una de las recepciones de gala previas a la boda de los reyes Juan Carlos y Sofía. Teresa de Baviera, abuela de la novia, llevó la tiara en el baile previo a la boda de la infanta Pilar y para la boda de sus dos hijas, Sonia (madre de Sol) y Myrta, así lo ha informado el investigador David Rato de Spanish Royal Jewels.
La tiara de la reina Letizia en Dinamarca
Los Reyes viajaron el pasado lunes a Dinamarca para reforzar los lazos y las relaciones entre ambos países. Para finalizar la primera jornada de la visita, Felipe y Letizia acudieron a la cena de gala ofrecida por la reina Margarita en el Palacio de Christianborg. Los Reyes acudieron con la Banda de la Orden del Elefante, la más alta distinción del reino de Dinamarca y que se usa casi exclusivamente para honrar a la realeza y los jefes de Estado. La faja de la orden es de seda azul y, al contrario de otras monarquías europeas (excepto la británica), se coloca en el hombro izquierdo con el elefante apoyado en la cadera derecha. La insignia de la Orden es este elefante hecho de oro y esmaltado en blanco con carcasas azules.
Doña Letizia, como siempre, ha deslumbrado con un vestido de gala en color azul, un diseño de Felipe Valera que ya le hemos visto en otras ocasiones. Concretamente, lo estrenó en 2015 para la cena de gala ofrecida al entonces presidente de Perú, Ollanta Humala, en el Palacio Real. También se lo pudimos ver para su visita de Estado a Japón en 2017. Pero lo mismo que ha ocurrido con la novia Sol Matossian, la tiara ha sido la verdadera protagonista.
Letizia ha escogido la tiara más especial del joyero real: la Tiara Flor de Lis. Está realizada con 450 diamantes y 10 perlas montadas en una estructura de platino y formando tres flores de lis rodeadas de enredaderas. La flor de lis es el emblema de la dinastía de los Borbones, creada en 1906 por la firma española Ansorena. Un regalo de Alfonso XIII a su prometida, la princesa Victoria Eugenia de Battemberg. ¡Espectacular!