Texto: Andrea Pérez Catalán. Nuestro lugar de inspiración se consolida en las pasarelas ready to wear de New York donde encontramos las nuevas propuestas de los diseñadores bridal por excelencia. En ellas el blanco se pasa al lado oscuro con el negro o al más romántico con el rosa. Los volúmenes se guardan en el baúl de los recuerdos y se pasan a lo minimal y los detalles siguen pisando fuerte pincelados con gasa y escotes pronunciados, tanto en la espalda como en el cuerpo.
Estas son sus propuestas:
Inspiración New York Bridal Week
Pásate al lado oscuro
Una novia siempre debe ir de blanco o, ¿no? La duda ha caído entre nuestras manos después de ver las propuestas de los diseñadores en la New York Bridal Week y como muchas celes se han pasado a este color para su boda (como es el caso de Liberty Ross o Avril Lavigne). La versión más trasgresoras del vestido de novia llega pisando fuerte y en este caso se sube a las pasarelas cerrando el desfile de Naeem Khan, como contrapunto a una serie de vestido de blanco impoluto, rosados o con toques burlones de morado coronados con pedrería, plumas y muchos, muchos encajes. Una colección que rebasa romanticismo y que sirvió para decirle al mundo que el blanco es cosa del pasado.
El dos piezas como infalible
No se han ido, siguen ahí, haciéndose hueco poco a poco, imponiendo su forma de hablar, su forma de combinar, su manera de reciclarse en las fashion weeks. Las camisas, los pantalones pata de elefante, las blusas y las faldas se han reinventado hacia el look bridal. Las novias ya no quieren ser princesas, quieren ser divas de la moda, diosas del mundo bridal, y se pasean en dos piezas como lo que nos muestran Lela Rose y Carolina Herrera.
Bienvenidas diosas del Olimpo
Jenny Packham da la bienvenida a las diosas que adormecieron los cielos del Olimpo gracias a sus vestidos en color marfil perfilados por toques sutiles de pedrería,donde el liso absoluto se convierte en glamour a ritmo de pliegues.
Diademas de flores el accesorio que no se rinde
Así nos lo dicta Temperly. En su bridal show amanece una nueva novia con toques púrpura difuminándose sobre el blanco de la gasa, los brocados y una espectacular corona de flores que pone el punto y final al look.
Un toque de pink para darle vida al look
Y es que si rompemos con el blanco, hay que hacerlo con toda la paleta de colores. A la hora de teñir el vestido, el rosa se impone como color fetiche de las colecciones. Marchesa y Houghton son algunos de los diseñadores que se han pasado al lado más pink con gasas, tul y plumas.
Todo por una espalda abierta
Los pequeños detalles son los que importan y las espaldas al aire son el éxito clave en cualquier look nupcial. Carolina Herrera lo sabe y se pasa a los escotes en las espaldas adornadas en gasa y transparencias, en hileras delicadas que caen y concluyen en nidos entrecruzados que transforman el vestido de novia. ¿El toque maestro? Las flores de crochet delicadas, fruncidas en un corpiño de palabra de honor que se fusionan en una falda estilo princesa con bandadas de tula doquier.
Las novias ya no quieren ser princesas
El revival continua su jugada maestra y saca a bailar, en este caso, a los vestidos sesenteros impuestos por una Marilyn Moroe caminando por las rejillas de ventilación. Marchesa ha querido hacerle una verdadera declaración de amor a su vestido más famoso y nos trae su versión mejorada para novias en la New York Bridal Week.
A sumergirse en un mundo floral
Los detalles florales se imponen tanto en los adornos del vestido como en los complementos para la cabeza. Un claro ejemplo es Marchesa que deja a la vista cada uno de sus minuciosos detalles coronando las mangas, los escotes en V y las faldas, dejando que ese look romántico se consolide con un único detalle: a golpe de flores.
