El ramo de flores del día B es uno de los complementos por los que más cuesta decidirse. Son muchas las opciones entre las que elegir, y cuando, por fin, tienes la elección perfecta, te das cuenta de que las flores no son para siempre. Pero, la solución está en secar el ramo de novia para conservarlo para siempre.
Te acompaña en uno de los momentos más importantes de tu vida, es precioso y es el complemento imprescindible de una novia. Hay muchas tradiciones alrededor del ramo de novia, desde regalárselo a un ser querido hasta tirarlo hacia atrás para las invitadas solteras.
Pero, si eres un poco recelosa de que se lo quede otra persona y no quieres deshacerte de tu ramo de flores, puedes utilizar alguna de las técnicas que te contamos a continuación para secar el ramo de novia.
6 formas de secar el ramo de novia
Secado boca abajo
Esta es una de las técnicas más tradicionales y antiguas para secar flores. Es tan sencilla como coger el ramo, atarle a la parte del tallo una cuerda y una goma, para a continuación, colgarlo boca abajo y dejarlo secar en un lugar con luz natural y bien ventilado. A lo largo de los días, verás como las flores se van secando y menguando. Una vez que esté completamente seco, podrás utilizarlo como decoración.
Secado con gel de sílice
El gel de sílice es un producto arenoso que se puede encontrar en las tiendas de artesanía. Es una de las técnicas que, a primera vista, parece más profesional y más técnica. Pero, no te asustes en usarla, porque es tan sencilla como el resto. Tan solo tienes que enterrar el ramo en un recipiente que cubra las flores con el gel de sílice. Pasada una semana, sácalas y verás como el resultado es increíble, como si estuviesen frescas como el primer día.
Secado en microondas
Aunque suene descabellado, sí, el microondas es una rápida solución para secar el ramo de novia. El resultado será muy parecido al de secado boca abajo y puedes llevar a cabo dos procedimientos. Para el primer, coloca un papel absorbente en el microondas y pon encima las flores y un vaso de agua al lado. Programa el microondas 2-3 minutos, y al sacarlas deja reposar las flores un día.
Para la segunda opción, utiliza un recipiente apto para microondas, pon las flores y cúbrelas con arena (la arena para gatos es perfecta).
Secado en horno
Los mejores ramos para secar en el horno son los que tienen flores muy tupidas, como los crisantemos. Para ello, pon las flores en la rejilla del horno y programa a una temperatura de 70 grados durante dos horas. Para evitar que se quemen las flores, deja la puerta del horno medio abierta.
Secado prensado
Esta también es una técnica muy antigua y que seguro que ya has usado, pero algo más complicada para un ramo entero. Para ello, separa las flores del ramo y colócalas entre dos papeles de cera. A continuación, coloca libros pesados encima y al cabo de unas semanas estarán secas.
Secado en jarrón
Esta es la técnica más cómoda y vaga, ya que tan solo tienes que dejar que las flores se sequen en el jarrón. Pero, si no quieres que se queden torcidas, cerciórate de que el jarrón sea lo suficientemente alto, para que el tallo no se doble. Con este tipo de técnica, las hortensias son perfectas para el secado.