Hacemos un repaso de los vestidos de celebrities más emblemáticos o, al menos, así los hemos coronado nosotras, las internautas que nos hemos encargado de crear este ranking.
Según Google, estos son los vestidos de celebrities más buscados. ¿Hubieras incluido o excluido algún diseño de esta lista?
Los 5 vestidos de novia más buscados
Meghan Markle. Su vestido se ha coronado como el más buscado de las royals. Un sencillo y discreto vestido de Givenchy que lució en mayo de 2018. No es de extrañar que sea el vestido más buscado de Google ya que esta boda, a día de hoy, sigue siendo muy comentada.
Kate Middleton. El vestido realizado por Sarah Burton para Alexander McQueen, fue confeccionado en tonos marfil y blanco, tenía escote corazón y llevaba un cuerpo de encaje francés de manga larga creado a mano por la Real Escuela de Costura. La falda tenía mucho volumen y su cola tenía tres metros de lago con encaje y flores de seda en tonos marfil. La parte del corpiño hecho en satén y estrecho en la cintura. Según el diario The Daily Telegraph, Kate encargó tres vestidos distintos para garantizar la sorpresa, en el caso de que hubiera habido alguna filtración.
Gwen Stefani. Este pasado verano, la cantante se casaba con Blake Shelton. Gwen se casó con un diseño de Vera Wang de escote en forma de corazón con un corsé. En la parte inferior, una falda de varias capas de tul desmontable.
Ariana Grande. El vestido de la cantante era de satén y líneas simples. De palabra de honor, dejaba al descubierto su espalda en la que se podía apreciar su pequeño tatuaje. Grande decidió no abusar de los complementos y lució un velo más bien corto y unos pendientes en forma de gotas. Su maquillaje tampoco fue precisamente recargado pero no puso faltar su clásico cat eye.
Diana de Gales. El vestido acaparó la atención de todas las miradas y de todas las cámaras aquel 29 de julio de 1981. . De su diseño se encargaron los diseñadores David y Elizabeth Emanuel, cuya primera cliente de alta costura había sido Bianca Jagger, también para vestirla el día de su boda.
El vestido era digno de una princesa de cuento: mangas voluminosas, una cola de casi ocho metros de largo, cintura ceñida y bordados con perlas y lentejuelas. Además, llevaba una herradura con diamantes bordada en la cintura como talismán de la buena suerte.