¿Solo de pensar en el gran momento se te pone un nudo en el estómago y parece que no puedes respirar? ¡Tranquila! Tenemos todo lo que necesitas para combatir los nervios preboda.
Por supuesto, lo más normal es sentir nervios a la hora de organizar todos los preparativos de una boda pero, para que ese sentimiento sigan pareciendo mariposas y no cuchillos afilados, te traemos todos los tips para controlar que tus nervios no se conviertan en tu peor pesadilla.
Las claves para afrontar una boda sin estrés
Haz una lista de objetivos. Una mente ordenada descansa mucho mejor. Anotar las cosas pendientes que nos quedan por hacer nos ayudará a planificar nuestros días. Además, tachar los logros nos hará sentir en paz con nosotras mismas.
Delega y respira. Es probable que en ciertos momentos creas que no puedes abarcar tantos temas. Es el momento de respirar profundo y pedir ayuda. Aunque las wedding planners son las personas más especializadas en este tema, no tienes por qué contratar una si así no lo deseas. Tu madre, tu suegra, tu hermana, tu mejor amiga… Todas ellas estarán encantadas de poder participar en el gran día. Si quieres seguir teniendo tú todo el control, delega en ellas cosas más simples como encargarse de que el chófer conozca a la perfección el camino hacia el lugar del “sí, quiero”, o que tus flores estén a la hora del enlace.
Los momentos de relax no son opcionales, son obligatorios. Puede que seas de esas novias que no sienten la fatiga y piensan que siempre pueden más y más. Esto es totalmente cierto pero, aún así, necesitas tomarte un descanso. Un día de compras, una tarde de mimos… La desconexión es fundamental para volver con más ganas “a la carga”.
Despeja tu mente. Uno de los problemas fundamentales a la hora de enfrentar los nervios de cara al gran día es que no somos capaces de pensar en otra cosa. Enfocarte en otro objetivo, aunque sea por dos horas, aliviará una gran carga de tu mente. Para esto puedes practicar deporte o, simplemente, ver una maratón de tu serie favorita.
No juegues con tu sueño. Descansar es una parte muy importante en este proceso. Recuperar energía hará que podamos rendir mucho más en nuestras tareas. Si te cuesta conciliar el sueño, puedes probar con técnicas de respiración e, incluso, tomarte una infusión antes de dormir. Una de las mejores es la llamada Melisa. La planta Melisa es medicinal y nativa de Europa, concretamente, de la cuenca del Mediterráneo. Destaca por su poder relajante siendo muy beneficiosa para el insomnio y aliviar los dolores de cabeza.