La ilusión que sienten Tamara Falcó e Íñigo Onieva por su gran día es casi tangible. La marquesa de Griñón y el empresario preparan cuidadosamente los detalles para su boda.
Tamara Falcó, como buena novia, ha comenzado a preparar también su físico para llegar radiante al altar.
Tamara Falcó y su puesta a punto beauty para el gran día
Lo cierto es que la hija de Isabel Preysler y Carlos Falcó ya se ha sometido a algún que otro retoque estético como la rinoplastia con la que consiguió una nariz menos voluminosa, trabajo del doctor Javier de Benito quien también operó a Carmen Borrego; ácido hialurónico en los labios para aportarles hidratación y volumen o bótox en las arrugas de expresión.
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De cara al gran día, Tamara ha querido potenciar sus pómulos. Posiblemente lo haya hecho a través de inyecciones no invasivas como el ácido hialurónico, el endoret, que es un plasma o bótox. Se trata de un tratamiento al que muchas novias recurren para enmarcar su rostro de cara al día más especial de sus vidas.
Además, algunos medios de información han apuntado a que Tamara se habría podido realizar un relleno de ojeras a través de ácido hialurónico ya que había sido vista en un centro ocular. Sin embargo, y nada más lejos de la realidad, la marquesa de Griñón ha querido tenerlo todo previsto para que nada pueda fallar en el día B y ha decidido acudir a su óptica de confianza para graduar su vista.
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Tamara Falcó está poniendo todo a punto para que todo resulte perfecto en su boda con Íñigo Onieva, ¿se atreverá Tamara con algún mini cambio en su melena?
