Has planeado hasta el último detalle de tu boda, todo está saliendo a la perfección y entonces te das cuenta de una cosa: ¡tienes que ir al baño! Que no cunda el pánico, sabemos cómo hacer pis con el vestido de novia y que no resulte un fracaso.
No lo planeaste, ni por un instante pensaste en todo lo que podía suponer el hecho de tener que hacer pis, ¿quién se para a pensar en eso? En tu kit de novia no hay nada que te ayude en este momento.
De repente, solo estás tú, el baño y un precioso vestido de novia que en este momento desearías no tener. Después de aguantar y aguantar las ganas, ha llegado la hora de no poder más. Tienes que armarte de valor y dirigirte al baño, tienes que hacer frente a tu peor pesadilla. En estos momentos, por tu cabeza solo pasan las cosas que podrían salir mal… Necesitas un plan, y nosotras, lo tenemos. ¡Atenta!
Tips para hacer pis con el vestido de novia
Ayúdate de tus damas de honor
Son tus amigas, y quieren que todo salga perfecto. No les importará ayudarte en este delicado momento. Si crees que no harían, entonces, no las escojas como damas de honor. Han estado mientras te vestías, ahora, chicas, toca sujetar el vestido y colocarlo de nuevo.
Planead una estrategia
Seguro que el vestido está abotonado y colocado al milímetro, todo perfectamente planeado y en su sitio, por eso, tomaos unos minutos para pensar con claridad cada uno de los movimientos a llevar a cabo. De lo contrario, viviréis una de las situaciones más desagradables.
Date tiempo
Esto no es como muchas de las noches de fiesta en la que todas las amigas vais juntas al baño de la discoteca. Requiere tiempo y calma. Así que, nada de ir al baño antes de partir el pastel o del primer baile como marido y mujer.
Tratad el vestido con cuidado
Nada de acercarse al vestido con las manos sucias ni con prisas. Si tienes que quitarte el vestido entero, ¡los zapatos primero! No querrás salir del baño con una mancha…
¡Bebidas fuera!
Que nadie, nadie, nadie, entre en el baño cargando con su bebida. La barra libre seguirá fuera cuando salgáis de ahí, no os preocupéis. ¿Una copa derramada sobre el vestido de novia? Entonces, solo tendrás ganas de encerrarte en el baño y no volver a salir.