Finalmente, los rumores se han convertido en realidad y está confirmado: Meghan Markle y el príncipe Harry esperan su primero hijo que, al parecer, saldrá de cuentas la próxima primavera.
Este lunes no nos hemos podido levantar con una noticia mejor: un mini-royal está de camino. Así es, al parecer, los rumores se han convertido en realidad y ya podemos decir que Meghan Markle va a ser mamá.
Tres semanas han sido las que los medios hemos especulado con su embarazo. «Esconde barriga, la oculta con el abrigo, ahora con una carpeta…» El Kensington Royal lo ha confirmado esta misma mañana de lunes:
«Sus Altezas Reales El Duque y la Duquesa de Sussex se complacen en anunciar que La Duquesa de Sussex está esperando un bebé en la primavera de 2019. Sus Altezas Reales agradecen todo el apoyo que han recibido de personas de todo el mundo desde su boda en mayo y están encantados de poder compartir esta feliz noticia con el público».
Así lo ha anunciado la Casa Real Británica en sus redes sociales. La noticia la han dado justo tres días después del enlace de su prima Eugenia de York con Jack Brooksbank. Seguramente, Harry y Meghan no quisieron desviar la atención de la boda y es por eso por lo que lo han anunciado hoy.
En el comunicado los Duques de Sussex también agradecen el apoyo recibido desde que son marido y mujer. Este notición también ha coincidido con la llegada de los Duques a Australia, donde han iniciado su primer gran viaje oficial. Iniciarán una gira por Oceanía, recorriendo Australia, Fiyi, el reino de Tonga y Nueva Zelanda.
Meghan Markle estaría embarazada de unos cuatro meses, por lo que se quedaría embarazada en verano. Posiblemente, mediados de junio o julio. Y es que este nuevo bebé no va a poder llegar en un mejor momento, ocupando el séptimo lugar en la línea de sucesión al trono británico, después de Carlos de Inglaterra, el príncipe Guillermo, el príncipe Jorge, la princesa Carlota, el príncipe Luis y el príncipe Harry.
Nosotros desde aquí solo podemos desearles lo mejor en esta nueva etapa. ¡Felicidades, parejita!