La boda de los Kennedy fue una de las más importantes de la época de los 50-60. Hoy os contamos los detalles más románticos de este enlace.
John F. Kennedy y Jacqueline Bouvier, más conocida como Jackie, se conocieron a través de unos amigos. Charles y Martha Buck Bartlett organizaron una cena al estilo preppy, en Georgetown, Washington D.C. (Este estilo es una mezcla entre el aire universitario y la sastrería tradicional, en el cual podemos ver los clásicos uniformes con faldas de cuadros, camisas, jerséis de cuello en pico y escudos bordados. Todo muy americano).
Fue ahí donde John F. Kennedy conoció a Jackie. Por aquella época, ella trabajaba en el Washington Times-Herald como cámara y reportera, acababa de graduarse en 1951. John F. Kennedy, por su parte, peleaba por un puesto en el senado. Fue ahí cuando la pareja comenzó a salir. Durante dos años vivieron discretamente su historia de amor, hasta que JFK, ya senador de Massachusetts, le pidió matrimonio a Jackie justo después de que volviera de cubrir la coronación en Londres de la reina Isabel II.
El anillo de pedida de Jackie Kennedy es uno de los más citados de la historia. Muchos anillos se han inspirado en este modelo de diseño art déco de Van Cleef & Arpels. Presentaba un diamante de 2,88 quilates en el centro y una esmeralda de 2,84, ambos en talla cuadrada y ambas gemas rodeadas de diamantes en talla baguette.
El 12 de septiembre de 1953 fue el gran día: la boda de los Kennedy.
La boda de Kennedy: todos los detalles
Los Kennedy se casaron en la iglesia de St. Mary de Newport, en Rhode Island. Fue una boda de día y tuvo más de 800 invitados, eso sin contar las más de 3.000 personas que los esperaron fuera de la iglesia y que no se querían perder detalle. Senadores, políticos, actores, hombres de negocios… Por ese entonces Jackie Kennedy tenía 24 años y aún no sabia que se convertiría en la primera dama de los Estados Unidos.
La boda de los Kennedy impactó a todos, ya que eran un clan poderoso e influyente. Para el vestido de novia, Jackie confió en Ann Lowe, la pionera diseñadora afroamericana. Un vestido en color marfil en tafetán de seda, con escote en barco, manga corta, ceñido en la parte superior y con una amplia falda de corte princesa. Llevó velo, que perteneció a su abuela años atrás y joyas que también eran de la familia. Excepto la pulsera de diamantes y perlas que llevó y que le había regalado JFK la noche anterior a la ceremonia para llevar ese “algo nuevo” tradicional, y el broche de diamantes en forma de hoja que le regalaron sus suegros.
El look nupcial de Jackie Kennedy ocupó todas las portadas de las revistas.
La novia entró del brazo de su padrastro, mientras en el altar la esperaban el novio y el arzobispo Boston, que ofició la ceremonia y leyó una bendición enviada especialmente por el Papa Pío XII. La iglesia estaba decorada con gladiolos rosas y crisantemos blancos. Un tenor solista, Luigi Vena, interpretó el Ave Maria durante la ceremonia, algo que hizo la boda de los Kennedy mucho más emocionante.
Después de la ceremonia, los novios se trasladaron al lugar de la celebración. Fueron escoltados con motos hasta la finca de la familia Auchincloss, la Hammersmith Farm, donde los invitados pudieron degustar un exquisito menú con: pollo a la crema, ensalada de palmitos y ananá y helado de postre. De la tarta nupcial de cinco pisos se encargó una pastelería de la familia.
Todos los asistentes brindaron con champán por el amor del nuevo matrimonio y bailaron al compás de las canciones de Meyer Davis y su orquesta. (Años después este mismo cantante también actuaría en el baile de inauguración de la presidencia de Kennedy). Después de la fiesta, los novios partieron para comenzar su luna de miel en Acapulco. Los invitados los despidieron con confeti y pétalos de rosa.
No todo fue bonito y sencillo para la pareja. Pasó el tiempo y Jackie se quedó embarazada de su primer hijo, pero tuvo muerte fetal. Fue extraído del vientre materno sin vida, algo muy duro para la pareja. Luego llegaron Caroline y John Jr. Y en 1963, siendo ya Kennedy presidente, Jackie se quedó de nuevo embarazada, aunque tuvo un parto prematuro y el bebé no logró sobrevivir más de tres días.
La renovación de La Casa Blanca
JFK se convirtió en el presidente más joven de los Estados Unidos al derrotar a Richard Nixon. La televisión jugó un papel determinante. Kennedy tenía una imagen joven, segura y seductora en los debates, y eso terminó por inclinar la balanza. Jackie a su lado también ayudaba, era una mujer encantadora.
La boda de los Kennedy trajo glamour a La Casa Blanca. Comparados con los otros presidentes y sus primeras damas, los Kennedy eran una pareja joven. La prensa hablaba de ellos como iconos de moda, sus looks eran los más copiados y buscados. Jackie se encargó de cambiar La Casa Blanca añadiendo nuevos cuadros, con una decoración más moderna, e invitando a distintas celebridades, escritores y artistas a casa.
Sin embargo, la presidencia de los Kennedy tan solo duró dos años. El 22 de noviembre de 1963 JFK fue asesinado en Dallas en la parte posterior de la limusina presidencial, junto a su mujer. El presidente se dirigía del aeropuerto al centro de convenciones, donde se celebraba un almuerzo con empresarios. Alrededor de las 12:30 h. se oyeron unos disparos y Kennedy se desplomó sobre Jackie. El vehículo aceleró hacia el hospital y media hora más tarde certificaron su muerte.
Las tragedias de los Kennedy
A pesar de que los Kennedy eran una de las familias más aclamadas de los Estados Unidos, no han tenido mucha suerte, pues la muerte siempre ha estado acompañándolos. La primera hija de Jackie y JFK nació sin vida y, el último hijo, tan solo vivió unos días. John Kennedy y su hermano Robert fueron asesinados. Y el otro hijo de Jackie y John Kennedy, John Jr., murió con su esposa en un accidente de avión. Jackie murió en 1994 por un cáncer.
La única superviviente de los Kennedy es Caroline, que fue embajadora de los EE.UU en Japón hasta 2017.