Cristina y Miguel se conocieron hace 5 años. Ella trabajaba en una consultoría y él llegó, como por arte de magia, para sustituir a una de sus compañeras.
Los caminos de Cristina y Miguel se entrelazaron por casualidad “cuando me enteré de que se iba mi compañera de la empresa donde trabajaba me llevé un disgusto tremendo, -explica la novia- pero ella me dijo que seguro que el chico que entraba en su lugar me caería muy bien… y no iba desencaminada”.
El 28 de septiembre de 2019, Cristina y Miguel sellaron su amor.
Cristina y Miguel: una boda personalizada única en el mundo
– La novia
El vestido de la novia era de Sara Lage. Cristina siempre había admirado el trabajo y el entusiasmo de esta diseñadora, por lo que siempre tuvo claro que sería ella la encargada de vestirla en su gran día. El resultado fue un vestido de dos piezas compuesto por una capa y una cola que se quitó cuando finalizó el banquete para gozar de una mayor comodidad.
Se trataba de un diseño midi con mangas abullonadas francesas. Tanto las mangas como la espalda en tul, como las partes inferiores y la cola de la capa, iban rematados con unos bordados espectaculares.
– Los complementos
La novia lució dos fabulosas piezas de M de Paulet, marca de la que son fundadoras su hermana Alicia y ella. Ambas diseñaron dos piezas totalmente exclusivas y novedosas. Dos creaciones que jamás se habían visto hasta ese momento, lo que resultó doblemente satisfactorio para Cristina: en primer lugar, porque en su gran día llevaba algo único en el mundo y, en segundo lugar, por el proceso de creación al lado de su hermana. Estas dos piezas llevaban la esencia que representa ese lazo tan fuerte que las une.
Para la ceremonia y el banquete diseñaron dos peinas enredaderas asimétricas en oro y decoración de cristal, que se unían en la parte inferior de la cabeza a modo de tiara invertida.
Para la fiesta, Cristina optó por un look más cañero, para el que crearon una tiara XL de cristal, nácar y piezas de metal.
– Las joyas
La novia optó por el anillo de pedida que Miguel le había regalado de Suárez y un anillo joya familiar en el dedo índice.
– Los zapatos
Cristina tenía claro que quería lucir unas sandalias altas y blancas que no se ataran en el tobillo. Sin embargo, lo que en su cabeza era completamente real, en las tiendas no lo era tanto. Por eso, la firma Jorge Larrañaga se encargó de cumplir sus sueños y diseñó las sandalias que tanto ansiaba Cristina.
– El maquillaje y el peinado
Tanto del maquillaje como del peinado se ocupó Irene Taviel de Andrade. La novia optó por un look beauty con eyeliner y labios en color burdeos con el que se sintió ella misma durante su gran día.
Respecto al peinado, la novia se decantó por una sencilla coleta, ya que quería que el protagonismo fuera para los tocados que habían creado para aquella ocasión con tanta ilusión.
– Las flores
De la decoración floral se encargó Javier Enea, de Flor de Enea. Primó una decoración rústica, silvestre y muy acogedora.
– El novio
Por su parte, Miguel llevó un chaqué de Canali, confeccionado a medida en Ramiro Díaz. Los zapatos eran de Berwick. Además, el novio lució unos gemelos fabulosos con sus iniciales que le había regalado Cristina.
– La madrina y la madre de la novia
Ambas llevaron unos maravillosos diseños hechos a medida, La madre de la novia eligió una sastrería de Jerez, mientras que la madrina, una de Santander.
– Las invitadas más elegantes
La hermana y la cuñada de Cristina se llevaron el puesto número uno en el ranking de las invitadas mejor vestidas. Su hermana confió en Alicia Rueda para su vestido. Por su parte, su cuñada lució un vestido de Carot, una boutique multimarca de la que es responsable junto a la madre de la novia, en Santander.
– La ceremonia y la celebración
La ceremonia tuvo lugar en la Iglesia de San Miguel de Jerez de la Frontera, ciudad de la que es Cristina. Un Monumento Histórico-Artístico Nacional: su torre es el punto más alto de la ciudad.
Respecto al banquete y a la fiesta, los novios eligieron la Hacienda La Peñuela, también en Jerez. Tanto de la comida como de la repostería se ocupó la empresa sevillana Catering Miguel Ángel.
– Las invitaciones
Las primas de la novia, Marta y Laura, fueron las encargadas de crear el diseño con el que los novios comunicaron a sus familiares que se iban a dar el ‘sí, quiero’. La Copistería Jerez se encargó de la impresión.
– Los regalos de las invitadas
Los novios obsequiaron a sus invitados con una pulsera personalizada. Además, para que todo el mundo pudiera disfrutar plenamente de aquel gran día, también les regalaron unas sandalias. Todos los invitados pudieron bailar libremente en la boda de Miguel y Cristina.
– Momentos más emotivos
Uno de los momentos más especiales para Cristina fue cuando entró en la Iglesia, agarrada del brazo de su padre y viendo a Miguel al fondo. Y también la entrada de los novios como recién casados al comedor al ritmo de batucada con percusión que tocaron unos amigos de Miguel.
– Fotógrafo
Alejandra Salido fue la encargada de inmortalizar los momentos más especiales de la boda de Cristina y Miguel.
– Wedding Planner
Bea, de Bianca Wedding, fue la persona que ayudó a organizar el gran día que Cristina y Miguel tanto habían soñado. Gracias a su labor, la novia pudo disfrutar plenamente de su día sin tener que preocuparse por nada más.
– Luna de miel
Los recién casados decidieron dividir su luna de miel en dos fases. En la primera disfrutaron de Japón (Tokio, Kioto y Osaka). Y en la segunda, la tranquilidad de Las Maldivas les cautivó.