La presencia de melenas canosas en mujeres con una fuerte relevancia pública y social puede abrir un debate personal sobre teñirlas o no.
Obviamente, ambas son decisiones válidas. Lo importante es que se han abierto más opciones y que el tinte, que tanto daña al cabello, deja de ser la única posible.
El lenguaje de las canas
Las canas son un símbolo de senectud. Aunque en muchas ocasiones aparecen en personas jóvenes, indudablemente las asociamos al proceso natural de hacernos mayores. “Cuando aparecen en personas jóvenes, sobre todo chicas, suelen teñirse siempre. Al mirar el rostro, no veremos a una persona mayor, pero es normal que si eres joven no quieras presentar una imagen con la que no te identificas porque no te encuentras en esa etapa vital. No es muy frecuente, pero hay chicas que con veintitantos años que ya presentan canas.”, asegura Charo García, de Salón Ilitia, de Valmaseda (Vizcaya).
Razones para lucirlas
Todo lo relativo a la imagen personal es una cuestión delicada e íntima en la que solo debe decidir la persona en cuestión. Sin embargo, en caso de dudas o indecisión, nunca está de más recurrir a un peluquero para que te asesore sobre si te favorecen o no, o simplemente como llevarlas. “Las canas siempre hacen sumar años, justamente porque aparecen en la madurez. Llevarlas puede ser el resultado de la decisión de aceptar que envejecemos, que el tiempo pasa por nosotros y lo abrazamos tal y como es. Sin embargo, también puede ser debido a no querer acudir tan frecuentemente a la peluquería para realizar el mantenimiento del color y la raíz. Y ambas opciones son igual de respetables.”, afirma M.ª José Llata de Peluquería Llata Carrera desde Santa Cruz de Bezana (Cantabria).
Motivos para teñirlas
Los motivos para teñirlas pueden ser el de hacernos sentir mejor, el que la imagen que proyectemos se corresponda con cómo nos vemos por dentro, o simplemente que no nos gusten. “Las canas no le sientan bien a todo el mundo, como sucede con cualquier otro tono del cabello o corte. Además, no todas son iguales y pueden no resultar nada favorecedoras. La coloración permite no solo rejuvenecernos, sino hacerlo de forma favorecedora. Las mechas o el color son siempre trabajos personalizados con matices que responden a un estudio de la persona. Y como todo, tiene sus contras, pero es algo que debemos valorar para saber si nos compensa”, matiza Rafael Bueno de Rafael Bueno Peluqueros desde Málaga.
Cuidarnos es fundamental
Las dos opciones necesitan de cuidados específicos. A algunas personas les pueden resultar más cómodas las canas porque no precisan de visitas frecuentes al salón, y a otras teñirlas porque no les gustan, pero igualmente, para verse bien, hay que cuidarse. “El corte es fundamental para que nos sienten bien. También hay que tener en cuenta los cuidados específicos, un pelo canoso tiende a amarillear y a estar encrespado y uno teñido va perdiendo el color y se ve apagado. Si no queremos aparentar dejadez, llevar el pelo cuidado es la clave.”, declara Felicitas Ordás de Felicitas Hair desde Mataró (Barcelona).
Enfatizar para mejorar
Una melena canosa puede ser tan bonita como cualquier otra, sin embargo, no todas son iguales. En ocasiones, las canas no aparecen de forma uniforme, y una opción para mejorarlas es enfatizarlas. “Muchas mujeres deciden aplicar color para potenciar las canas y conseguir un color más bonito y homogéneo que, sin duda, crea una imagen potente y vibrante. A veces nos gustan, pero no cómo nos crecen, y enfatizarlas es la solución.”, sostiene Raquel Saiz de Salón Blue desde Torrelavega (Cantabria).