A través de las imágenes podemos revivir los mejores momentos de nuestras vidas. Y más si se trata del matrimonio. En Craus fotografía, una agencia especializada en fotografía de bodas, saben lo importante que es captar y congelar esos instantes especiales y únicos.
La fotografía congela momentos importantes y nos permite volver a ellos siempre que queremos. Gracias a las imágenes, hemos podido saber cómo vivían en épocas anteriores y han sido, en muchas ocasiones, las grandes fuentes de documentación para la historia, la moda, el arte, la literatura, el cine, la música…
Y uno de esos momentos importantes puede ser una boda. Qué mejor ocasión para congelar el tiempo y que ese tiempo sea dedicado al amor entre dos personas. De ello se encargan en Craus fotografía, una agencia fotográfica especializada en diferentes campos como son los eventos, la publicidad, la moda, el retrato, el fotoperiodismo y su principal eje: el sector nupcial.
Con una mirada única y a través del objetivo, en Craus buscan una visión diferente con un estilo cuidado e inspirado en la fotografía cinematográfica. Van al detalle, al instante íntimo, elaboran composiciones y escenas que desprenden emoción y sentimientos. Prestan especial atención al color y a la luz: “Queremos que haya magia y que la pareja pueda revivir ese día siempre que mire nuestras fotos“.

Fotografía de bodas
Trabajo artístico y profesionalidad porque cuidan al milímetro su trabajo: entregan el material editado en menos de un mes para que los novios puedan elegir las fotos del álbum con imágenes definitivas; asisten dos personas a cada celebración y con el equipo duplicado para que nada falle.

En Craus fotografía saben que cada boda es diferente y que cada imagen cuenta su propia historia. Los planos, el enfoque, el lugar…. y el objetivo desde el que se hace la foto. Además, están al día en las últimas tendencias del sector pero mantienen su esencia, su estilo y su forma de trabajar. Técnia, profesionalidad y arte que dan como resultado una fotografía de autor enfocada al mundo bridal. ¿Qué más se puede pedir?

