En el Somerset House de Londres, Penélope Cruz nos ha vuelto a dejar sin palabras con su tremendo outfit. La actriz española más famosa siempre brilla en la alfombra roja pero, esta vez, además ha sido nuestra fuente de inspiración para crear un look divino para ser la invitada de una boda.
Penélope Cruz ha vuelto a brillar en su última premiere. Ayer asistía a la alfombra roja británica para apoyar a Pedro Almodóvar en su última película, Dolor y Gloria, estrenada en España el pasado 22 de marzo.
Penélope Cruz nos enseña el vestido para ser la invitada perfecta
Del brazo del director del largometraje, la actriz lucía un vestido de Ralph & Russo con el que deslumbró a todos los focos. Se trata de un original diseño ajustado que combina pedrería y lentejuelas en tonos rosas y nude con algún detalle azul. Además, la forma que toma el vestido simula la de un caleidoscopio. Las plumas ponen la guinda a un vestido totalmente espectacular. Además, este 2019, las plumas han arrasado y se han convertido en tendencia. Sin embargo, Penélope siempre apostado por estos adornos y han sido numerosas las alfombras en las que la española nos ha dado la impresión de que casi podía volar con todas las plumas que adornaban sus looks.
Por su parte, la falda del vestido es midi e incluye una elegante abertura que convierte de repente un vestido que sería muy difícil de llevar en una pieza totalmente accesible. La actriz decidió que el vestido ya era suficientemente protagonista y lo combinó con un sencillo recogido despeinado y un maquillaje sumamente natural.
Unas preciosas sandalias color champán en los pies combinaban a la perfección con sus pendientes y el maravilloso clutch que la actriz escogió para asistir a este evento tan especial. Jimmy Choo fue la firma en la que Penélope confió para caminar segura. Además, las joyas escogidas por Pe pertenecen a su colección de Swarovski, Atelier Swarovski By Penélope Cruz.
Elegancia y dulzura es el resultado que la española ha creado con este outfit brillante con el que cualquiera de nosotras podríamos ser la invitada perfecta.