Alexa Chung se atreve con el amarillo y se convierte en la invitada perfecta más atemporal y reivindicativa
Si hablamos de supersticiones nupciales, vestir de amarillo en un enlace es algo que, a día de hoy, muchos y muchas invitadas descartan. Asociado a la “mala suerte” el color amarillo se ha ganado una mala reputación, nada merecida, que lo relega a una de las últimas posiciones a la hora de elegir entre las diferentes tonalidades para un look.
Vestir de amarillo no es un error, palabra de Alexa Chung
No sabemos si ha sido para reivindicar que este mito es exactamente eso, solo un mito, porque es su color predilecto o simplemente porque le gustaba, pero Alexa Chung ha escogido este color para asistir a la cena Vogue 100 en colaboración con Erdem, que se celebró en la National Portrait Gallery de Londres.
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La it girl vistió un diseño precisamente de la firma anfitriona, Erdem, de la colección otoño-invierno 2023/24 con el que defendió a la perfección la tonalidad más temida de todas. A través de un vestido de corte asimétrico confeccionado en tafetán en el que los volantes se hubieran convertido en los grandes protagonistas de no ser por el llamativo color que caracterizaba la pieza.
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Alexa no lució más complementos que unos zapatos planos negros que nos han enamorado por su sencillez y elegancia y que combinaban con sus medias, también negras.
Una elección muy acertada con la que puede animar a futuras invitadas a inclinarse por este color para asistir a sus eventos y darle un toque de lo más glamuroso.
