Las nuevas generaciones, los millennials, deciden mudarse juntos antes de dar el “sí, quiero”. Como ya sabemos, estos jóvenes aplazan la fecha del matrimonio para crecer primero personal y profesionalmente, y mudarse con su pareja, es un gran paso en su relación.
Mudarse juntos, así es realmente
Muchas parejas deciden mudarse juntos antes de comprometerse. Es una manera de probar su compatibilidad y aprender del otro. Pero, ¿es eso realmente? La convivencia no es siempre color de rosa, pero sin duda es un paso muy importante para todas las parejas. Aprender a compartir el espacio y llevar las manías del otro hará mucho más fuerte vuestra relación.
Cuando os mudáis juntos por primera vez son muchas las cosas a planear: desde la decoración, los platos a cocinar, las tareas, los horarios, etc. Sí, puede parecer estresante, pero, ¿qué pareja no se emociona al planear la primera mudanza juntos? Y, ¿qué hay detrás de las mudanzas en pareja?
No podrás esconder esas áreas o detalles a mejorar en tu día a día. Además, ya no te verá siempre perfecta. “Sí, así me levanto cada mañana”.
Cuando debáis compartir espacio, te darás cuenta de la cantidad de ropa que posees. “¿De verdad tengo que deshacerme de todo esto?”
“¿Desde cuándo el papel higiénico se acaba tan rápido?”
Prepárate cada mañana para correr al baño.
Discutiréis por quién tiene la culpa del desorden. “Hay calcetines por todos lados”
El lado de la cama es innegociable…
“Me gustan los carbohidratos para cenar. Y esto, tampoco se negocia”
Te darás cuenta de que él, también es presumido
“¿Su mejor amigo venía con la casa?”
Pero lo cierto es, que comenzaréis una nueva y apasionante vida juntos