A pocos días de empezar las fiestas, te contamos cuáles son los principales fallos que cometemos y que nos hacen engordar y subir una talla en Navidad.
Aunque estas Navidades son un tanto diferentes y las viviremos con ciertas restricciones de horarios o número de personas en la mesa, no existen limitaciones en cuanto a la cantidad de reuniones y reencuentros, que suelen venir acompañados de copiosas comidas que alteran nuestra rutina y nuestra salud.
Las cenas de Navidad pueden derivar en un aumento de peso que puede llegar a oscilar entre los 2 y los 5 kilos de media. Para remediarlo, te revelamos algunos de los motivos principales que nos hacen descontrolarnos en estas fechas.
Motivos que hacen que engordemos en Navidad
1. Tenemos más reuniones de las habituales: durante la Navidad tenemos más comidas y cenas. En este sentido, tenemos que ser consecuentes y tratar de compensar los días fuertes con otros más ligeros, que nos ayuden a equilibrar la balanza con alimentos bajos en calorías y grasas, para amortiguar los excesos. Un buen aliado será desayunar un zumo “detox”, cargado de ingredientes depurativos como apio, limón o kiwi, necesarios para el perfecto funcionamiento de los procesos metabólicos de desintoxicación de nuestro hígado.
2. Practicamos menos deporte: durante la Navidad hacemos menos deporte. Estar activos será fundamental para mantener el peso. Es importante buscar al menos 30 minutos al día para mover el cuerpo y activar el metabolismo y, si no es posible, intentar hacer actividades cotidianas como subir las escaleras en lugar de coger el ascensor o evitar movernos en transporte público o coche, siempre que sea posible, para no permanecer inactivos.
3. Comemos más de lo que necesitamos: lo cierto es que en estas reuniones se sirve mucha más cantidad de comida de la acostumbrada. Las mesas repletas de suculentos platos presidiendo el comedor son ya una tradicional estampa navideña. Debemos evitar los atracones y empaches, evitando comer todo lo que hay en la mesa. Opta por los platos más saludables como el marisco, la sopa, el pavo o el pescado, propios de estas fechas, masticando bien y comiendo despacio para aumentar la sensación de saciedad.
4. Abusamos de los dulces: roscón, panetone, mantecados, turrón… son algunos de los típicos dulces de navidad, que solo se comen una vez al año. Pero no hay que comerlos a todas horas. Puedes buscar otras alternativas dulces como las golosinas Yummy Sweets, 0% azúcar y con el sabor y textura tradicional, con tan solo 99 kcal en cada bolsita.
5. Bebemos menos agua y más alcohol: en estas fechas también es usual acompañar las comidas con bebidas alcohólicas, las cuales están cargadas de ‘calorías vacías’ y no contienen nada bueno para el organismo. Estas calorías son mayores en alcoholes de alta graduación y, por ello, se recomienda no tomar más de 1 o 2 copas de vino o cerveza, rebajar las cantidades con algo de casera y compensar bebiendo mucha agua, pues esto último será fundamental para depurar, eliminar las toxinas acumuladas por el exceso de alcohol y de alimentos ricos en grasas y evitar la retención de líquidos.