Fue en marzo cuando Meghan Markle y el príncipe Harry llegaron a Los Ángeles, después de anunciar el año pasado que dejarían de ser miembros ‘senior’ de la Familia Real de Inglaterra y trabajarían para ser independientes financieramente.
De acuerdo con las últimas informaciones proporcionadas, Meghan Markle y el príncipe Harry están siendo protegidos por GDBA, una de las empresas de seguridad de celebridades más reclamadas. Pertenece a Gavin de Becker, el estadounidense especialista en seguridad, y es demandada principalmente por gobiernos, corporaciones y figuras públicas.
Meghan Markle y el príncipe Harry tienen nuevo servicio de seguridad personal
Lo más llamativo es la tarifa que pagan los duques de Sussex por esta exclusiva seguridad personal: 8.700 dólares diarios, es decir, más de tres millones de dólares al año por un equipo de profesionales formado por seis miembros. La seguridad de GDBA protege también a grandes celebridades como Jeff Bezos, Tom Hanks, Jennifer Lawrence o la propia Madonna.
De hecho, el equipo de profesionales de esta agencia tiene un refinado proceso de selección, ya que está integrado por ex oficiales de inteligencia del FBI y la CÍA, así como ex marines de los EE.UU y científicos conductuales especializados en la evaluación de amenazas.
La casa en la que reside el nieto de Isabel II se encuentra en la cima de una colina, en la exclusiva zona de élite de Beverly Ridge Estates, una residencia ubicada en Beverly Hills propiedad del magnate de Hollywood Tyler Perry. Su mansión está constituida por ocho dormitorios, doce baños y una amplia parcela donde puede jugar el pequeño de la familia, Archie.
