Viernes, domingos e, incluso, días entre semana: así son las bodas de la nueva normalidad.
Muchas fueron las bodas que el año pasado tuvieron que ser aplazadas y han tenido que recolocarse. La agenda nupcial está repleta de fechas en las que el amor reinará. Sin embargo, existe cierta saturación respecto a los “días clásicos” en los que los novios prefieren darse el “sí, quiero” que son, por antonomasia, los sábados. ¿Qué están haciendo los novios para buscar soluciones?
La pandemia deja unos novios mucho más flexibles a la hora de organizar
Optar por días como los viernes o los domingos para celebrar su amor. Y es que no solo fueron los intensos meses de confinamiento entre marzo y mayo cuando las parejas se vieron obligadas a cambiar la fecha de su boda: los repuntes, las continuas restricciones, la imposibilidad de que sus parientes más cercanos asistieran a su boda… Muchos han sido los factores que han alterado los enlaces. Por eso, ahora los novios lo tienen claro: no les importa qué día, solo saben que quieren casarse.
Lo cierto es que pasar por el altar un viernes era una tendencia a la alza que ya podíamos intuir antes de la pandemia, sobre todo, de aquellas personas que querían recortar un poco en presupuesto.
Además, en relación con esto, ahora los futuros marido y mujer son mucho más flexibles. Si antes tenían una idea clara de que su enlace tenía que ser por la noche y era algo inamovible, ahora no le dan tanta importancia. A fin de que los novios cumplan el sueño de casarse, muchas iglesias han decidido reforzar los turnos de bodas y, aunque alivia la situación, todavía son muchas las parejas que tienen su “sí, quiero” pendiente.
Y tú, te casarías un viernes o un domingo?
