Al igual que en la vida, en las relaciones no todo es color de rosa. También hay momentos desastrosos en los que sintáis que todo va mal. Estos son los 5 momentos complicados que pondrán a prueba vuestra relación. Si los superáis, habréis aprendido la lección.
Al principio todo es encantador, mágico, pasional… Hasta que la realidad nos estampa en la cara y nos despierta como un jarro de agua congelada. No todo en la vida es color de rosa y al igual que discutimos con nuestros padres, hermanos, primos, amigos o compañeros de trabajo, también discutiremos o tendremos algún encontronazo con nuestra pareja. Porque sí. Porque las polémicas son un elemento sine qua non de los seres humanos y sus comportamientos sociales.
Y en el fondo debemos estar agradecidos porque sino existieran los encontronazos puntuales, la vida sería mucho más aburrida y no aprenderíamos a perdonar, a tolerar y a ponernos en la piel de los demás.
He aquí 5 momentos complicados que pondrán a prueba vuestra relación, si los superáis –la mayoría de pareja lo hacen– vuestro amor será verdadero y más fuerte que nunca. Habréis aprendido la lección:
1. Primera señal de rutina. Los primeros meses son todo pasión e ilusión pero pasa el tiempo y pasa también la novedad y puede convertirse en un problema. Cuando se llega a este punto, se debe aceptar y entender que una relación pasa por muchas etapas y debéis centraros en las cosas buenas que tiene esa confianza que habéis creado.
2. Primera discusión con unas copas de más. Cuando bebemos alcohol –y a todos nos pasa– somos más sinceros y cualquier tontería puede provocar una discusión con amigos, familia o pareja. Una mirada inocente a otra persona, un reproche del pasado, un comportamiento diferente… pero tranquilos, al día siguiente lo veréis todo de otra forma y podréis solucionar ese desencuentro.
3. Preguntas sin respuesta. En ocasiones uno de los dos propone planes y el otro contesta un “no sé” o un “me da igual” y suele generar un momento de tensión entre ambos. No siempre se tienen ganas de hacer las mismas cosas o no siempre se está de ánimos. Es normal. Y la otra persona debe tolerar y comprender. Lo mejor es buscar soluciones.
4. Salir de fiesta con desconocidos. Puede pasar y pasa que en alguna ocasión uno de los dos se una a los planes del otro con gente que no conoce. Si eres tú y no conoces a nadie, no puedes depender de tu pareja todo el tiempo. Habrá ocasiones en las que suceda al revés. Por eso respira profundo e intenta socializar todo lo posible y conocer a esos desconocidos.
5. Regalos. No siempre os van a gustar los regalos o las sorpresas que os hagáis mutuamente para Navidad, por vuestros cumpleaños, aniversarios… Es normal. Hay veces que se acierta y otras que no. Pero ello no debe ser un motivo de discusión ni una señal de que las cosas no van bien. Recordad: lo que cuenta es el detalle.