Muchas veces pensamos demasiado en nuestro vestido de novia y en nuestros complementos y nos olvidamos de cosas que también son importantes, como la lencería de boda que vamos a utilizar en nuestro día.
Parece algo secundario pero elegir la lencería de boda no es tarea fácil. La ropa íntima es esencial para sentirnos cómodas durante este gran día (y durante todos) y es importante que sepamos elegirla bien. No solo interesa lo bonita que se vea nuestra combinación. También es importante que nos sintamos bien con nuestro conjunto interior, y nosotras podemos ayudarte a ello.
Lencería de boda: cómo elegirla
A continuación te vamos a dar unos pasos para elegir bien la ropa interior del día de tu boda. Atenta porque cada detalle cuenta:
– Comodidad ante todo
El conjunto de ropa interior que elijas para casarte, no tiene nada que ver con el de la noche de bodas. Porque siempre se podrá cambiar, así que no hace falta que busques algo extremadamente sexy. Aquí es importante que busques una armonía entre lo cómodo y lo bonito. Evita las piezas reductoras y compresoras que no permiten moverte con facilidad, elige piezas que se amolden a tu cuerpo. Y apuesta por tejidos que sean cómodos y frescos.
– Ten en cuenta tu vestido
La lencería de boda es importante que la elijamos una vez tengamos el vestido en nuestras manos porque todo gira en torno a él. Lo primordial es que nuestra ropa interior no se note con nuestro vestido. No puede ver a través de él y ni siquiera puede percibirse a la hora de movernos. Con vestidos de tela ligera o fluida es más posible que se vea, por lo que debemos escoger la ropa en tonos beige o nude.
El corte del vestido también es algo a tener en cuenta. En vestidos que tengan la falda voluminosa, la ropa interior es más fácil de disimular. En este caso podremos elegir partes inferiores que sean de talle más alto, lo que proporcionan una mayor comodidad y sujeción. Sin embargo, en vestidos ajustados tendremos que elegir ropa de talle bajo y tejido fino para que pase desapercibido.
En cuanto a los sujetadores existen muchas opciones. Hay veces que, incluso, es innecesario ya que el propio vestido te aporta la sujeción que necesitas. Pero si este no es tu caso, veamos.
En vestidos de palabra de honor se puede llevar corsé con espalda baja pero cuidado a la hora de que apriete demasiado, esto a lo largo de las horas puede resultar incómodo y hasta doloroso. También existen sujetadores sin espalda, que se adhieren a la forma del pecho.
Los bodys también son una buena opción, sobre todo si tu vestido tiene más escote de lo normal en la zona de la espalda. Muchas veces es la prenda más cómoda para todas.
– Ropa interior moldeadora
Hay novias que quieren sentirse seguras y intentar paliar esas partes que menos gustan, al menos durante este día, por lo que escogen prendas moldeadoras. Utiliza el sujetador para evitar un busto que se vea exagerado o para darle un toque y que llame más la atención. En cuanto a la parte inferior, usa braguitas altas o fajas reductoras, que van muy bien si tu vestido es ajustado. Eso sí, que nada se note.
– Las medias
Las medias, ese elemento tan tradicional. Prohibido usarlas blancas, eso está pasado de moda. Utiliza medias de verano que den un tono de color a tu piel o, directamente, no utilices medias y luce piernas.
En caso de utilizarlas, cuidado con las medias con puntera y las sandalias o estaremos cometiendo un pecado.
– La noche esperada
La noche de bodas. No hace falta que utilicemos el mismo conjunto que para la boda, además, si para la ceremonia hemos buscado la comodidad seguramente este conjunto no sea el más sexy. Te recomendamos ropa interior diferente, más delicada y que tenga algo más de picardía (si tú quieres). Utiliza camisones, encaje o pijamas de seda, lo que sea necesario para que tú te sientas bien y a la vez hagas sentir bien a tu pareja.
Al igual que con los looks de calle y con tu vestido de novia, con la ropa interior también tenemos que ser fieles a nuestra personalidad. Aunque aquí juega algo más que nuestra ropa interior, la imaginación.
