Ana y Alejandro se casaron el pasado mes de mayo rodeados de familiares y amigos, y en un entorno idílico. Os contamos todos los detalles de su enlace.
Ana y Alejandro se conocieron en el verano del 2006, en Navacerrada, un pueblo de la Sierra de Madrid. Les presentó un amigo que tenían en común. Era amigo de Alejandro del colegio y, a la vez, amigo de la novia, del grupo de amigos que tenía en la sierra. No fue hasta un año después que la pareja comenzó a salir. Sus 12 años de noviazgo lo celebraron casándose por todo lo alto el 25 de mayo de 2019, en un lugar espectacular. ¿Quieres saber dónde?
¡Os contamos todos los detalles de la boda de Ana y Alejandro, un enlace que os va a dejar fascinados!
Boda de Ana y Alejandro: los novios
Nos encanta el vestido de novia que Ana lució en su boda. Se trata de un diseño de Navascues, de manga francesa formado por dos piezas, un vestido con cuerpo en crepé con la espalda descubierta y una larguísima cola de organza que nos ha dejado enamoradas. Un vestido sencillo que decoró con un chaleco de encaje de bolillos. ¡Súper original y elegante!
- Los zapatos
Ana tenía claro que quería unos zapatos que dieran a su look nupcial un toque de color. Y también quería un calzado cómodo para poder disfrutar de todo el día y también bailar durante toda la noche. Al final optó por unos zapatos en color verde, de un tono muy similar al color del eucalipto del ramo de novia.
Unos zapatos de Jorge Larrañaga.
- Las joyas
Ana quiso ser una novia sencilla, por lo que utilizó lo básico. Recuerda que, muchas veces, menos es más.
Ana llevó el solitario de pedida. Unos pendientes de su madre de brillantes negros y blancos. Un colgante de oro blanco que le regaló su hermano y su cuñada y un broche, que llamaba mucho la atención, prendido en el velo. Se trataba de una joya de la familia materna de la novia.
«Me hacía especial ilusión llevar el broche, todas mis primas lo han usado el día de su boda, además soy muy sencilla y no quería sentirme disfrazada, por lo que no quise llevar otros complementos», nos cuenta la novia.
- Las flores
Nos encanta el ramo que llevó Ana el día de su boda. En tonos rosas con bonitas peonías como protagonistas y eucalipto de SAI más que flores, Zaragoza. «No pudieron acertar más con la idea que teníamos y con el ramo de novia»
- Maquillaje y peinado
Tanto para el maquillaje, como para el peinado, Ana confío en las manos de Eva Fernández.
Un maquillaje sencillo, con sombra de ojos con toques oscuros para resaltar la mirada. Y labios nude. Un resultado que nos ha gustado mucho.
- El novio
Alejandro también quiso ser un novio sencillo y de lo más elegante. ¡Nos encanta esta foto de máxima concentración mientras coloca sus puños de la camisa. Los momentos previos al esperado «Sí quiero»!
Alejandro llevó chaqué y tanto el traje como la camisa eran de la firma Guzmán. Los zapatos de Antonio Parriego y la corbata de la firma Lester. Su hermana le regaló los tirantes de Silbon.
- Complementos de Alejandro
Nuestro novio protagonista llevó unos gemelos de la Joyería Aguayo, un regalo de pedida de los padres de la novia.
Ana también quiso hacerle un regalo de pedida a su amor y le regaló un reloj TagHeuer.
- La madrina y la madre de la novia
La madre de Alejandro, Cristina, visitó de azul. Un look de Conchita Saiz.
La madre de Ana, Marga, llevó un vestido de Antonio Rivas.
Boda de Ana y Alejandro: la ceremonia
Si hay algo que nos gustó de esta boda, además de los maravillosos novios, fue el lugar donde se celebró la ceremonia. En la Iglesia Abacial del Monasterio de Piedra.
Esta boda fue muy especial. Fue una celebración de fin de semana. Todos los amigos de los novios quisieron estar presentes y acompañarlos en este gran día. Desde Madrid, Barcelona, y las Islas Canarias… ¡Nadie quiso perderse la boda de Ana y Alejandro!
El día antes de la boda, los novios dieron un cóctel de bienvenida para todos sus invitados que terminó de la mejor manera. Una preboda, en toda regla, que se fue un poco de las manos. ¡Acabaron a las tantas de la noche pero, qué bien lo pasaron!
- Invitaciones y regalo para las invitadas
Las invitaciones y los misarios se los encargaron a Relieves Heysa. Como regalo especial para las invitadas, unas pashminas de Gift Empire.
- El momento más emotivo
Para Ana, los mejores momentos fueron: cuando los mejores amigos del novio, siguiendo la tradición catalana, le llevaron su ramo de novia a la habitación y le leyeron un poema; ir del brazo de su padre hasta el altar; ver a Alejandro esperándola; y cuando vio a su compañero de carrera, que está en el seminario, ayudar a oficiar la ceremonia junto a Monseñor Eusebio Hernández Sola, el obispo de Tarazona.
Para el novio, el momento más emocionante fue cuando vio a Ana caminar por la alfombra roja junto a su padre.
- Invitada o invitadas más elegantes
Las invitadas más elegantes fueron Carolina y Marta, prima de la novia, que ayudó con todo el tema de la cola del vestido.
- Fotógrafo
El encargado de captar los mejores momento del día de la boda fue SyB Photography Bodas.
- Luna de miel
Para finalizar esta celebración de amor, los novios fueron de luna de miel a Sri Lanka y Maldivas, un viaje que repetirían una y mil veces. Para organizar todo el viaje buscaron ayuda en la Agencia Pangea. ¡Un viaje de ensueño!