Puedes proteger tu piel con un filtro físico o un filtro químico, pero ¿sabes cuál es la diferencia entre uno y otro tipo y cuál es el más adecuado?
Cada vez hay una preocupación mayor por la composición de los productos cosméticos, y la protección solar no iba a quedarse atrás. Pero hablando de fotoprotección, hay otro debate en auge ¿Filtros físicos o filtros químicos?
Diferencia entre filtro físico y filtro químico
Los filtros físicos actúan a modo de pantalla reflejando la luz y desviando los rayos ultravioletas para prevenir las quemaduras solares, y su composición es de origen mineral.
El Óxido de Zinc y el Dióxido de Titanio son los ingredientes más comunes usados en protectores naturales y tienen una gran ventaja, especialmente para los más pequeños, y es que no pueden ser absorbidos por piel.
«Hasta hace poco, se tenía la falsa creencia de que los protectores solares con protección física eran densos, aceitosos o blanquecinos… pero no todos son así si sabes elegir una opción natural con una formulación adecuada», Afirma Rocío L. Cuesta, doctora cum laude en farmacología y CEO de Alma Secret.
Hoy en día, a los filtros físicos se le añaden filtros biológicos e ingredientes orgánicos que también suman a la protección solar, para que su textura y protección sea perfecta. Los filtros físicos no es necesario aplicarlos 30 minutos antes de exponerte al sol ya que, desde el momento que se aplican, ya están protegiendo la piel.
Los fotoprotectores de Alma Secret, por ejemplo, están formulados de manera natural y son ideales para todo tipo de pieles, incluso para las más sensibles y reactivas, y también para las de los peques de la casa.
Es muy importante usar un protector solar para el rostro y otro para el cuerpo, ya que la piel es distinta y necesita propiedades distintas. Alma Secret cuenta con una Crema facial con alta protección solar spf 50, (27,50 €/ 50 ml) y con una Crema corporal con alta protección solar spf 50 (22,50 € / 100ml), ambas aptas para todo tipo de pieles y con protección solar de amplio espectro que protege de los rayos UVA, UVB, HeVis (Luz azul) e IR (Infrarrojos).
Los filtros químicos, por su parte, se han usado siempre en la protección solar y los hay en todas las texturas imaginables: más fluida o más densa, en spray, oleosa… Captan la energía solar y la transforman protegiendo la piel del sol.
Su principal inconveniente es que, aunque todos los que se usan en cosmética deben ser seguros, al absorberse a través de la piel pueden ocasionar ciertas alergias. Además, deben aplicarse unos 30 minutos antes de la exposición solar.
Los filtros químicos son los más populares en el mercado y los más usados son: Oxibenzona, Avovenzona, Octisalato, Octocrileno, Homosalato, Octilmetoxicinamato o Cinamatos.