Es lo más normal del mundo que en cuanto te hayan pedido la mano, te mueras de ganas de empezar a organizar tu boda. Sin embargo, hay determinados aspectos de la planificación de los que no hará falta ocuparte en ese momento. ¡Te contamos cuáles son!
Entendemos que puede resultar muy tentador ponerte a organizar la boda en cuanto te hayas comprometido, pero querer abordar desde un primer momento los miles de aspectos que conlleva la organización de una boda no es lo más recomendable. Haciendo eso lo único que conseguirás es abrumarte, por lo que nuestro consejo es que te lo tomes con calma y no te ocupes de los aspectos que te contamos a continuación desde el principio puesto que no hará falta.
Aspectos de planificación que no tendrás que abordar desde el principio
1. Sentar a los invitados: no sirve de nada empezar a plantearte dónde vas a sentar a esos dos amigos o familiares que no se llevan bien. Piensa que puede que hasta declinen la invitación, así que hasta que no tengas todas las confirmaciones de asistencia es absurdo que te ocupes de este asunto.
2. Pensar en la decoración: es verdad que te va a apetecer meterte en Internet y ponerte a indagar lo último en el panorama deco nupcial. Redes sociales como Instagram o Pinterest lo ponen muy fácil con su gran cantidad de imágenes inspiracionales. Esto es divertido si de momento solo coges ideas, pero no te pongas a hacer números aún. Hasta que no sepas qué tipo de celebración vas a tener y demás es inútil presupuestar.
3. Establecer un calendario de tu día B: está bien que decidas si quieres una boda de día o de noche, pero hasta ahí. Lo más probable es que no seas experta en bodas, de ahí que lo mejor es contratar a una wedding planner, que te indique cómo encajar los diferentes momentos que vivirás en tu boda.
4. Música: os puede parecer muy guay pensar en la canción que sonará durante el baile nupcial y el resto de canciones importantes para el día de la boda, pero no tengáis prisa por cerrar este tema. Según se acerque la boda se os van a ir viniendo a la mente otras canciones cruciales en vuestra historia de amor que querréis que estén presentes en vuestro día. Estar abiertos a las sugerencias musicales de vuestro entorno y del DJ que contratéis es una buena idea.
5. Obsesionarte con el presupuesto: conviene no ponerse nervioso con el tema. Si bien es cierto que una boda trae consigo un desembolso económico importante, la mayoría de los proveedores establecen plazos para que hagas frente al costo de sus servicios. Tienes que hacer un presupuesto, pero no preocuparte por afrontar ese dinero ya, porque dispondrás de meses para hacerlo.
