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El vestido de novia que terminó en desastre

La boda de la semana: Gema y Marcos

Detalles de boda baratos, originales y divertidos

Oscuro Claro
¡Nos hemos quedado a cuadros!

Comprar el vestido de novia (o invitada) por internet, ¿acierto o error? El look que llevemos el día de nuestra boda será, seguramente, el más importante de nuestras vidas. ¿Te arriesgarías a comprarlo por Internet?

La sorpresa de esta novia al descubrir su vestido

En LucíaSeCasa, tenemos que admitir que somos fans incondicionales de la moda low cost y de las compras por Internet. Pero claro, no a cualquier precio (nunca mejor dicho). Hay ocasiones y ocasiones, y seguramente, nuestra boda no es el momento idóneo para improvisar y arriesgarnos.

Las compras por Internet son una opción muy cómoda. Tarjeta en mano, sólo tenemos que elegir la prenda que más nos gusta y esperar en casa a que llegue directa a nuestra puerta. Además, tenemos que admitir que las ofertas y bajos precios que estas páginas ofrecen a veces, son muy (pero que muy) tentadores.

Sin embargo, la realidad es que, cuando las compras llegan a casa, a veces nos llevamos una gran desilusión (no siempre, ni mucho menos). Es el caso de esta chica que recibió algo completamente inesperado y diferente a lo que tenía en mente.

vestido de novia que terminó en desastre
Foto: Ok Chicas

Esta novia soñaba con el perfecto vestido de novia: un vestido sexy y con una gran cola (vamos, como el que se encontró en la foto). ¿El resultado? Un vestido totalmente diferente, que no le sentaba ni mucho menos como a la modelo de la foto.

Desde LucíaSeCasa te recomendamos que en un día tan importante como tu boda, no te arriesgues con páginas dudosas o te estrenes en esto de las compras por Internet. Lo mejor que puedes hacer es, apostar por una firma o diseñador de referencia, con los que podrás probarte tu vestido (tantas veces como quieras) y con los que siempre te encontrarás exactamente lo que habías pedido.

¡Ojo! No estamos (en absoluto) en contra de las compras online o la moda low cost. Pero, ¿por qué arriesgarte el día de tu boda si tienes otros 364 días para comprar online?

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