Cara creció admirando la película de “La Bella y la Bestia” y su novio lo tenía claro: su pedida de mano debía ser única e inolvidable. Y así lo hizo. Con muchas tazas de café y sobre todo con muchas ganas, fue capaz de recrear el vestido de Bella para sorprender a su novia de una forma que jamás se habría imaginado. ¿Cuál creéis que fue la respuesta?
“¡Sí, quiero!”. Fue la respuesta de Cara después de probarse el vestido de Bella que su futuro marido había recreado a la perfección y verle arrodillarse para pedirle matrimonio. “Queriendo recrear la famosa escena, decidí hacerle un vestido que coincidiera con mi propuesta”. El proceso no fue nada fácil, pero era imposible pararlo. Equipado con una máquina de coser y un maniquí puso en marcha su plan. “Así comenzó el proyecto, en un sótano, con una máquina de coser barata y un sueño”.
Entre rollos y rollos de tejido amarillo y dorado, tijeras y muchísimos alfileres pudo llevar a cabo su propósito. Tras muchas horas de trabajo consiguió que el vestido de Bella encajara perfectamente en el cuerpo de su prometida. Pero eso no es todo, la proposición tuvo lugar en la sala de periódicos de la biblioteca de la Universidad de Iowa. Luces, música, vestido, anillo y una pregunta: “¿quieres casarte conmigo?”
Fue capaz de recrear a la perfección el cuento de su infancia y hacer realidad uno de sus sueños de niña. Caracterizada como Bella dijo “sí, quiero” a su futuro marido. Estamos seguras que su boda será un auténtico cuento de princesas.
